Aperitivo para o resto do artigo de Manuel Ballbé, professor catedrático da Universidade Autónoma de Barcelona, no El País:
Alemania, además, es quien promovió las apuestas contra la deuda del sur. El Deutsche Bank fue uno de los artífices de este nuevo Merkado de deuda soberana —y de su índice de precios Markit— que disparó los ataques especulativos. Goldman Sachs asesoró a Grecia para ocultar su deuda y así logró entrar en el euro, después, con esta información privilegiada, apostó junto con Deutsche Bank que Grecia se hundiría. Atacar a países del sur fue la fórmula del Gobierno y bancos alemanes para recuperar las pérdidas de sus bancos ludópatas.
Semejante giro depredador contra la propia zona euro lo motivó la filtración del informe confidencial del supervisor financiero alemán, el BaFIN (confirmado por otro de Merrill Lynch), que valoraba en 800.000 millones los activos tóxicos del país en 2009. Dichos datos delatarían que una Alemania especulativa había reemplazado a su reputado capitalismo industrial. En vez de procesar a los responsables, cerraron filas e iniciaron el descrédito del sur para desviar la atención y sojuzgarlos.”
Se as desculpas e asneiras económico-financeiras valessem alguma coisa, a Europa do sul estaria riquíssima e a Alemanha estaria na miséria. Acontece que sonhar / confundir / deturpar / caluniar está no poder dos teóricos, mas criar / conservar / manipular valor não está.
Só duas fadas conseguem esse milagre: a milenar fada do mercado da moeda (ouro para armazenar valor; prata e metais para circular e transaccionar valor; papel para contratualizar a detenção de valor) e a inesgotável fada do dentinho, muito invocada pela fundação Wiesenthal.
i>Jusqu’au boutisme monetarista? Não sei, mas a verdade é aquilo que é, e o resto até agora parece ser conversa fiada.